Cinco hábitos extraños de Yakarta (o siguiéndole el meme a Diego)

* Hacer leyes para luego incumplirlas



Por ejemplo, puedes ver a gente en cada calle jugando a las cartas, backgamon, dados y demás con dinero cuando está prohibido apostar, seguir viendo triciclos y autobuses calamar (llamados así por el humo negro que sueltan) más de un año después de que tengan prohibido circular, la reaparición de botellas de vino y otros licores en los supermercados un mes después de que su venta quedase prohibida... y un largo, caótico y maravilloso etcétera.

* Salir corriendo después de haber hecho "nongkrong" durante todo el día

El deporte nacional de Indonesia es el "nongkrong", un verbo que significa "no hacer nada nada de nada" y se ejecuta siempre de cuclillas pero con toda la planta en el suelo, una posición muy asiática imposible para guiris como nosotros.
Cada día se puede ver a centenares de Indonesia practicando este deporte en calles, carreteras, plazas, campos, parques, universidades, delante de televisores y en cualquier lugar inimaginable. El problema es que cuando cogen una moto, un coche o, sin ir más lejos, un ascensor, se transforman por completo y les entran las prisas: van a mil por hora, invadiendo aceras o yendo en contra dirección si es necesario y apretando el botón de cerrar las puertas del ascensor sin parar, cada vez más fuerte, para ganar tres segundos mágicos y aprovecharlos luego haciendo "nongkrong.

* Preguntar ¿dónde vas? a cualquier desconocido a cualquier hora

Dicen que es porque aquí no hay estaciones y como vivimos siempre a treinta grados centígrados no tiene sentido hablar del tiempo. Será por eso, vale, pero es rarito que la pregunta nacional sea ¿Dónde vas? (ke mana?) y te la pregunten desconocidos cuando pasas por la calle, en el ascensor, en un centro comercial... Lo peor de eso son las mañanas donde cada día, desde hace más de un año, tengo que pasar por delante de un minirestaurante para ir a la oficina y su dueño me pregunta cada cada cada día ¿dónde vas?. AAAaaaahahahaaaaaaaa



* Ser taxista sin conocer ni la calle principal (y no tener GPS ni mapa ni radio)

Ir en taxi en Yakarta es una gran aventura porque la mayoría de los taxistas son traídos de aldeas de la Java profunda y puestos en un coche sin tener ni idea de dónde están las calles principales ni los hoteles ni nada de nada y lo tienen que ir descubriendo solos, sin mapas ni radios ni GPS ni ninguna ayuda. Como consecuencia, quien no conoce Yakarta se pierde una y otra y otra vez y da más vueltas que una peonza. Cuando ya conoces la ciudad sufres la otra versión: saber más que el taxista y no creértelo. Es decir, cuando él te dice por aquí y tú crees que sería mejor por otro lado pero no lo dices acabas sieeeempre por una ruta muchísimo más llena de coches que la que tú tenías en mente.

* Sí sí sí sí (pero luego es no no no no, qué te creías majete)

Cuesta pillarle el truco a esta ciudad porque todo el mundo dice que sí, que ahora, pero en realidad eso puede significar cualquier cosa. Por eso, cuando llega gente nueva y la ves corriendo porque el de la mudanza les ha dicho que a las seis te quedas quieto. La próxima vez que hablas con el nuev@ te dicen que no llegaron o que llegaron tres horas más tarde o que llegaron con el camión vacío o cualquier cosa. Cuando llevas un rato te acostumbras a decir que sí y luego hacer lo que quieres. No probleeeeeeeeeem :)

Siguiendo a Diego, le paso el turno a Ramón, a Carlos y a Dani